domingo, noviembre 09, 2014

A 25 años de la caída del Muro de Berlín


El siglo XX ha sido un tiempo dramático en la historia de la humanidad. La primera mitad  marcada por dos cruentas Guerras Mundiales, con toda una carga de dolor y sufrimiento sobre millones de personas. La segunda mitad, un desconocido tipo de Guerra, la Guerra Fría; menos visible en términos bélicos, más letal por su capacidad de sembrar divisiones y odios entre hermanos. El mundo en esta etapa queda dividido por razones ideológicas, Europa quedó dividida en dos bloques,  Alemania en dos países. El drama de este tiempo tuvo su máxima expresión en El Muro levantado en Berlín en 1961, el cual dividió a una ciudad en dos partes, separando físicamente a hermanos de una misma nación, a ciudadanos de una misma ciudad.

Oficialmente el Muro fue levantado para proteger a la población de Alemania del Este de elementos fascistas que conspiraban, para evitar así que acabaran con la voluntad popular, de construir un estado socialista. En la práctica, el muro sirvió para impedir la emigración masiva que marcó a Alemania del Este y al bloque comunista durante el período posterior a la Segunda Guerra Mundial. Este muro estaba fuertemente custodiado y se calcula que 270 personas fallecieron al intentar cruzarlo sin permiso, estimándose que unas 33 mueren al pisar minas antipersonales.

Ese muro de Odio y División cayó en la noche del jueves 9 de noviembre de 1989, al viernes 10 de noviembre de 1989, 28 años después de su construcción. La apertura del muro, conocida en Alemania con el nombre de die Wende (El Cambio), fue consecuencia de las exigencias de libertad de circulación del pueblo alemán. Un anhelo de libertad inscrito en el corazón del hombre y que ninguna voluntad del hombre puede sofocar, como apuntó en repetidas ocasiones el papa Juan Pablo II. Con la apertura del Muro, Alemania se unificó nuevamente para volver a ser una. Los hermanos volvieron a estar unidos en torno a un solo color, una sola nación, una sola bandera.

Hoy quisimos Conmemorar los 25 años de la caída del Muro de Berlín en Petare, porque nuestra sociedad venezolana está dividida y polarizada por razones políticas. Odios se han sembrado entre algunos venezolanos y necesitamos cambiar esta terrible situación. Debemos cerrar esas heridas que el odio genera en el corazón. La caída del muro de Berlín es para nosotros una esperanza en medio de la desilusión que vive la inmensa mayoría del país. El muro que hoy derribaremos, la ventana que abriremos, es una luz de esperanza para todo los que soñamos con la unidad efectiva y afectiva de todos los venezolanos en torno a los ideales superiores como el progreso, la paz, la justica y la libertad.

Esta actividad fue posible a la Fundación Konrad Adenauer, y en especial al Sr Henning Suhr. También al trabajo de Fundalamas, del Teatro y Museo de Petare en su organización,  al colectivo taller de Bicicletas que construyó el muro que abriremos. Igualmente agradecemos al fotógrafo venezolano Jorge Andrés Castillo quien estuvo en Berlín Oriental y Occidental meses antes de la caída del muro de Berlín y pudo retratar la estética socialista cuando todavía nadie sospechaba lo que estaba a punto de suceder. A 25 años de la caída del muro, Jorge Andres Castillo exhibirá 27 fotografías de ese trabajo documental en el galería ICL Studio en Wynwood, Miami y en el Teatro Cesar Rengifo de Petare.


Cuando se abrió el muro, la mayoría de los bares cercanos al muro brindaron cerveza gratis a desconocidos que se abrazaban entre sí. Al finalizar la apertura simbólica de nuestro Muro también brindaremos en el Museo de Petare para ilusionarnos nuevamente con la Unión y el Cambio de todo el pueblo de Venezuela.

Cuando se abrió el muro, la mayoría de los bares cercanos al muro brindaron cerveza gratis a desconocidos que se abrazaban entre sí. Al finalizar la apertura simbólica de nuestro Muro también brindaremos en el Museo de Petare para ilusionarnos nuevamente con la Unión y el Cambio de todo el pueblo de Venezuela.

Mientras abramos el Muro sonará una canción que se convirtió en el símbolo musical de la unificación alemana. Vientos de Cambio del grupo alemán Scorpio. Esta fue la primera banda occidental es traspasar más allá del Muro, girando en conciertos al otro lado de la cortina de acero.
En la letra de dicha canción se lee:

Los niños soñaran los cambios que vendrán. Los sueños cambiaran la humanidad.

Por eso quisimos que los niños escribieran sus sueños en este muro simbólico. Los niños nunca dejan soñar, incluso imposibles. Que su sabiduría no enseñe a seguir soñando en una Venezuela de Unión y Cambio.

Muchas gracias!

Discurso a los 25 años de la Caída del Muro de Berlín
Plaza Sucre de Petare 9 de Noviembre de 2014

jueves, agosto 21, 2014

Tarjeta de Racionamiento en Venezuela

  1. Empecemos por llamar las cosas por su nombre. El "registro biométrico" es un nuevo esfuerzo de Nicolás Maduro por implantar en Venezuela la Tarjeta de Racionamiento cubana. 
  2. Desde el punto de vista político se generó un clima de necesidad con el "combate al contrabando", el cual venía a justificar  medidas económicas extremas como: el cierre de la frontera y la tarjeta de racionamiento. Ambas "insostenibles" e insuficientes; que dan sin embargo, “la sensación” de que  el gobierno está haciendo algo contra la escasez extrema que viven los venezolanos (más de 60% de escasez de los productos de la cesta básica según Datanalisis)
  3.  El problema de la escasez sigue siendo atacado por sus consecuencias, dejando intactas las causas que la ocasionaron. Sea en Venezuela, Cuba, el Antiguo Egipto o la Roma Clásica la escasez es consecuencias de los controles de precios.
  4. Los controles precios son establecidos con "fatal arrogancia" por algunos gobiernos que  sustituyen el mecanismo de mercado en la colocación de precios, por oscuros mecanismos que originan precios desde la comodidad de un ministerio, sin conocimiento “real” de los costos de las empresas y las preferencias de los consumidores. 
  5. El sistema de precios que produce el mercado son señales que permiten el flujo eficiente, racional y óptimo de los recursos y la información en la sociedad. La interrupción de este mecanismo genera un desequilibrio entre la oferta y la demanda que se manifiesta en la escasez. 
  6. La escasez es inherente al socialismo, el cual interviene el mecanismo de mercado generando colas, mercados negros y la desaparición de los productos de los anaqueles.
  7. La solución socialista a la escasez es más controles que generan más escasez: militarización de la economía (soldados en el automercado, en las empresas o fronteras) o controles al consumo como la tarjeta de racionamiento.
  8. En cualquier es responsabilizar al consumidor o a empresario del problema, evadiendo así el Estado toda responsabilidad de un problema del cual es culpable.
  9. El socialismo al no creer en la buena fe del ciudadano y las posibilidades de su libertad, tiene una insaciable voracidad por controlar más la vida de la gente. Con estos controles vendrán más amenazas contra la propiedad, que es en el fondo el objetivo socialista y el culmen del control.
  10. La Tarjeta de Racionamiento de Maduro será un nuevo fracaso económico, aunque desde el punto de vista comunicacional más de un inocente pensará en una nueva versión del Dakazo:  el engaño es una especialidad socialista.

lunes, julio 29, 2013

Los 100 días de Nicolás



Si hacemos un balance económico de lo que han sido los primeros 100 días de Nicolás en el poder, resulta difícil entender cómo un presidente con la bonanza petrolera más cuantiosa y larga de la historia de Venezuela ha logrado sumirnos en un estilo de vida que no es vida y que afecta directamente al presupuesto familiar.

Empecemos por la inflación, su más importante legado. En los primeros 100 días de Nicolás, la inflación se duplicó -de 7,1% (Enero-Marzo 2013) a 14,3%- y las inflaciones acumulada y anualizada alcanzaron el 21% y 37% respectivamente. De esta manera, Venezuela ha conquistado la inflación más alta del mundo, con unas reservas internacionales en picada que dan respaldo a sólo el 19% de nuestros Bolívares. Esta alta inflación es la medida del crecimiento de nuestra pobreza, una expropiación silenciosa al bolsillo de los venezolanos y, sobre todo, una gran injusticia social porque al ser la inflación de los alimentos mayor al del resto de los productos impacta un 10% más a los hogares pobres del país.

A pesar de los anuncios que llevaron al aumento del salario mínimo en mayo(2.457 Bs.F), con Nicolás en el poder la canasta alimentaria lo ha superado (2.737 Bs.F). Un hogar venezolano con un solo ingreso familiar sólo puede comprar el 90% de los alimentos de la canasta, y si el hogar se encuentra en ciudades como Maracaibo o Caracas, la situación es aún más dramática: solo 79%.

Si revisamos las cifras de escasez, el escenario es todavía más desalentador. La escasez en los primeros 100 días de Nicolás es la más alta de los últimos 5 años, superior al 20% y 33% más alta que el promedio del año anterior. Además, en este caso nuevamente se incrementa la injusticia social: en establecimientos como MERCAL, la escasez alcanza el 63%. .

Aunque aún no tenemos cifras oficiales de producción para el segundo trimestre del 2013, la caída en marzo de un 11% en la manufactura y la escasez de divisas y materia prima sólo revelan una cosa: a pesar de la bonanza petrolera, Nicolás metió a la economía venezolana en la estanflación.

Para salir de la estanflación –alta inflación mientras la economía se contrae- requiere dos medidas fundamentales: i) un orden monetario estricto que devuelva el valor y la confianza en el Bolívar, lo cual implica un Banco Central serio y competente con metas de inflación creíbles y ii) liberar la economía de tantos controles innecesarios para que el emprendimiento, la competencia y la libre iniciativa llenen los anaqueles de productos venezolanos.

 

miércoles, mayo 22, 2013

La corrupción de los vampiros



¿A quién le puede sorprender el audio que ayer oímos de Mario Silva? ¿No es verdad que oímos lo que todos sospechábamos y esperábamos que algún día se supiera? La fuerza del mismo no viene dada solo por el contenido del mismo, sino por quién lo dice, a quién lo dice, y el momento en que lo dice.
Mario Silva se había convertido en la fuente más importante que tenía la opinión pública a información de inteligencia, por lo que se ve ahora, inteligencia cubana exclusivamente. Mario Silva es un agente cubano de inteligencia dentro del chavismo; el audio que oímos lo dejó al descubierto y en la más clara humillación: es un pobre espía.

Mario Silva se había convertido es un sembrador de odios patentado, confeso e impune que cada noche vertía sobre sus enemigos sus infamias y tergiversaciones, aprovechando la información de inteligencia que el G2 y sus informantes le suministraba. Lo que ayer ocurrió era lo que esperábamos que empezara a ocurrir: el odio que se consume a sí mismo y destruye el sistema en su misma maldad y podredumbre.
Ese odio que se manifestaba sobre los opositores y su lucha, es el mismo que se ahora vierte sobre la alta dirigencia de la “revolución” y sus corruptelas: entiéndase Diosdao Cabello con CADIVI-SENIAT, José Vicente Rangel con sus contratos, y sobretodo Jorge Arreaza (la misma familia Chávez) con VTV.
No son acusaciones de corrupción sobre mandos medios e irrelevantes. Estamos hablando que las cabezas políticas y morales de la revolución están bañadas de corrupción y son protegidos hipócrita e incondicionalmente por el Sistema de Justicia, la Fiscalía, la Contraloría General de la República, la Defensoría del Pueblo, el SIBCI, el SEBIM, el DIM, el CICPC, la PNB, y todo el aparato del Estado corrompido también.

Estos personajes poderosos y enchufados han desangrado al país; su poder, altanería y riqueza contrasta con el pueblo llano (chavista y opositor) que pasa horas en una cola para echar gasolina, comprar alimentos, sacar un permiso, acceder a divisas. Con ese pueblo víctima de la violencia, de la inflación, de la pobreza.
El odio se ha servido de Mario Silva para sacar a relucir la verdad. Un odio que se consume a sí mismo y se inmola involuntariamente en su maldad, que se destruye en una especie de metamorfosis para dejar relucir la pureza de la verdad, el mejor antídoto para el mal que nos gobierna desde hace 14 años.

lunes, abril 18, 2011

La agenda económica 2013

Una disgresión con un poco de nihilimo

Venezuela ocupa hoy en día (2011) el índice más bajo de protección a la propiedad en el mundo. Se ha venido avanzando, especialmente desde 2006, en la construcción del socialismo, cuya principal bandera es la destrucción de la propiedad. Con gran razón se puede decir que la ideología del socialismo es el nihilismo (la nada), ya que eso es lo que queda al final del proceso, junto a la ilusiones perdidas en el engaño de un paraíso que nunca se hizo presente. No es otra la conclusión a la que han llegado millones de cubanos que se han cansado de esperar la manifestación de un reino que nunca llegará, y que el Partido Comunista Cubano tímidamente empieza a asumir, como quedó de manifiesto en el recién concluido congreso del mismo, con ocasión de los 60 años de la fallida invasión de Bahía de Cochinos.

Son tontos o ignorantes los que piensan que al final del camino de un proceso socialista, tendrán como puerto de llegada la falaz ilusión de lo que hoy en día es conocido erróneamente como socialismo escandinavo. Contradictoriamente, Suecia y Finlandia son las países que más protegen la propiedad en el mundo, Dinamarca es de los países con mayor libertad económica y con el mercado laboral más flexible de Europa. No son socialistas, ni han llegado donde están por haberlo sido, sino a pesar del intervencionismo del Estado del Bienestar.

Lo esencial del socialismo, además de las mentiras y el terror que quieren sembrar en quienes lo adversan, es el radical "nihilismo" que se manifiesta en la destrucción de la propiedad, la libertad, la justicia, las tradiciones y las costumbres; con el único fin de intentar sembrar la semilla del hombre nuevo, a la medida del capricho del gobernante. Los planes sociales del socialismo son un robo que hace a la economía del bienestar y no viceversa.

Desmontando el socialismo: dos planos

Estas consideraciones harto conocidas en la Venezuela de hoy, me sirven de colofón para preguntarnos sobre las acciones a emprender en el plano económico ante una eventual victoria de la libertad en el 2012, y los pasos a seguir en la construcción de una sociedad libre. Es decir, nos lleva pensar en: ¿Cómo desmontamos el Socialismo? ¿Será difícil desde punto de vista político, institucional y económico volver a un sistema libre? ¿Que queda al final? ¿Qué se puede rescatar? ¿Qué es políticamente viable? ¿Qué es técnicamente posible?

Debemos movernos en dos planos para poder dar una respuesta: el plano de los principios y el plano de la técnica. En cuanto a los primeros debemos decir que el rescate de la libertad y la propiedad se presentan como derechos y garantías que deben restablecerse inmediatamente, ya que son inherentes a la persona, a su dignidad y a su voluntad expresada políticamente en el voto. Estos principios son irrenunciables y necesarios para la reconstrucción de la nación. Los borrascosos años de la Revolución debieron habernos enseñado que estos principios son necesarios para vivir, para vivir en paz y para vivir bien. Escalar posiciones en la defensa de la propiedad, la libertad económica y la facilidad para hacer negocios ha de convertirse en una prioridad.

En cuanto al segundo plano, temo que la solución es mas indeterminada, y estará condicionada por el andar político y la gobernabilidad que los acontecimientos vayan marcando. Especialmente cuando pensamos en la restitución de la propiedades injustamente confiscadas y la progresiva liberalización de la economía. En este sentido cabe preguntarse: ¿ Que tan rápida debe ser la reforma? ¿Por dónde empezar? Creo que lo primero es colocar las piedras de lo que no existe y es más urgente: la recuperación de la infraestructura física e institucional, que será la base necesaria para el funcionamiento de una economía libre, abierta a la inversión y al comercio global. Esto no quiere decir que lo otro quede para un futuro incierto, la reformas deben ser conjuntas, pero la clave estará en la intensidad del esfuerzo y de los recursos. De nada vale una economía "libre" sin puertos, aeropuertos, autopistas, luz electrica, etc.

Dos agendas

El plano de la gobernabilidad nos llevará a no olvidar que Venezuela son dos países, con demandas y agendas distintas, para un sector serán necesarias reformas sociales que den mayor eficacia las antiguas "misiones" y para otro sector será necesaria una economía con menos restricciones que haga posible las primeras y que, las hagan innecesarias en el mediano plazo debido a la creación de empleo bien remunarado.

El fin de estas políticas debe tener como fin lograr mejoras sensibles en la calidad de vida de los venezolanos en los dos primeros años de gobierno, que den sustento y viabilidad política al modelo que hemos de presentar y que será la única alternativa para no volver al socialismo bolivariano, ni al intervencionismo del Pacto de Punto Fijo que desembocó en el socialismo totalitario y que no era otra cosa en el plano económico que, un avance interventor nunca revertido efectivamente, a pesar de los esfuerzos de la década del 90.

No la Venezuela de los 70 sino la de los 40

Giorgia en 6 años escaló 100 puestos en el ranking del Banco Mundial que mide la facilidad para hacer negocios. Creo que las reformas en Venezuela deben ir a esa misma velocidad si logramos victorias tempranas en el plano económico y social antes del 2015. La meta es acabar con la pobreza, generando riqueza, haciendo de Venezuela el mejor lugar del mundo para hacer negocios: esa característica que tuvimos en los gloriosos años 40 y 50 que nos trajo prosperidad material y que sentó la bases para una estabilidad democrática.




lunes, abril 12, 2010

Centro Compasivo

El nuevo “centro compasivo” de David Cameron http://www.aceprensa.com/site_media/img/anadir_art.gif

Aunque las encuestas prevén un resultado muy ajustado en las elecciones generales británicas del próximo 6 de mayo, el líder toryDavid Cameron ha logrado ilusionar a buena parte del electorado con la promesa de un nuevo “centro compasivo”. Se trata de una tercera vía que busca mitigar los excesos del liberalismo económico de Margaret Thatcher con medidas sociales, a la que vez que aspira a fortalecer los valores familiares y la sociedad civil.

Firmado por Juan Meseguer Velasco http://www.aceprensa.com/site_media/img/link_icon.gif
Fecha: 9 Abril 2010

La idea de una tercera vía entre el capitalismo y el socialismo comenzó a gestarse en la primera mitad del siglo XX, y cristalizó en propuestas sugerentes como el “humanismo económico” (Wilhelm Röpke) o la “planificación para la libertad” (Karl Mannheim).

Estas propuestas pasaron sin pena ni gloria. Hubo que esperar a los años noventa para que la tercera vía alcanzara fama mundial. Fue el sociólogo británico Anthony Giddens, inspirador del “nuevo laborismo” de Tony Blair, quien popularizó la idea y la metió de lleno en el debate político contemporáneo.

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El nuevo proyecto busca mitigar los excesos del liberalismo económico de Margaret Thatcher con medidas sociales, y a la que vez fortalecer los valores familiares y la sociedad civi

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Los críticos de Giddens –entre otros, Ralf Dahrendorf– siempre le reprocharon la ambigüedad de sus ideas. Algunos fueron todavía más lejos y le echaron en cara que su tercera vía no era tal, pues en realidad se inclinaba hacia un extremo: el individualismo. Buena muestra de ello es su visión de la familia, basada solamente en la satisfacción afectiva de la pareja.

Lo cierto es que el proyecto político diseñado por el binomio Giddens-Blair cautivó a mucha gente, dentro y fuera del Reino Unido, en busca de una “socialdemocracia renovada”.

Una de las claves del éxito de la tercera vía de Giddens consistió en presentar un núcleo de valores y de principios como elementos capitales del “nuevo laborismo”. Frente al pragmatismo de sus adversarios, Blair sorprendió a la opinión pública con ideas novedosas como el “Estado social inversor” o la “igualdad inclusiva”.

Además de la carga emotiva que transmitían estas ideas, sirvieron para forjar la convicción de que los laboristas iban en serio. Lo suyo no era un puñado de medidas inconexas, sino un proyecto unitario de largo recorrido.

El cambio de los conservadores

Sin embargo, tras el varapalo que sufrió el Partido Laborista en las elecciones europeas de 1999, Blair optó por presentar a las elecciones de 2001 un programa mucho más pragmático. De hecho, a partir de ese año, el líder laborista dejó de utilizar la expresión “tercera vía”.

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La reconstrucción de la sociedad británica ha de apoyarse en dos principios básicos: recuperar la noción de bien común y fortalecer el asociacionismo cívico

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Cuando Gordon Brown sucedió a Blair en 2007, el discurso de las grandes ideas pasó al baúl de los recuerdos. De cuando en cuando, Brown echaba mano de algún tópico sobre el elitismo de los conservadores u otro parecido. Pero su falta de carisma terminó por poner en un aprieto al Partido Laborista, desgastado por 13 años de gobierno.

Así las cosas, David Cameron ha tenido la audacia de presentarse a las elecciones de mayo con una idea brillante: el “centro compasivo”. Aunque su propuesta está mucho menos articulada que la de Blair, de momento ha logrado crear en los electores la sensación de que algo nuevo se está cociendo.

Así lo explicó el líder tory a sus colegas de partido en un convención celebrada el pasado 28 de febrero: “Ahora podemos mirar al pueblo británico a los ojos y decirle que estamos con ellos y que somos como ellos. Que estamos aquí para servir a este país compasivo, tolerante y multirracial. Que este Partido Conservador votó por el cambio y nunca se va a volver atrás”.

Ahora, por primera vez en diez años, los conservadores han logrado ponerse por delante de los laboristas en las encuestas. Es cierto que las ideas no son todo en política. Seguramente ha pesado mucho el déficit, el paro y las subidas de impuestos llevadas a cabo por el Partido Laborista.

Pero el hecho de que los tories hayan decidido entrar al debate de las ideas es toda una novedad. Ahora su proyecto ha ganado consistencia y genera ilusión.

Ideas de dos think tanks

El nuevo “centro compasivo” de Cameron es todavía un proyecto difuso. En esto ha influido la falta de un ideólogo incondicional al estilo de Giddens. Hoy por hoy, la propuesta del líder tory se nutre de dos think tanks: The Centre for Social Justice (CSJ), nacido en el seno del Partido Conservador; y ResPublica, un laboratorio de ideas independiente fundado por Phillip Blond, aunque vinculado ideológicamente a los conservadores.

La cabeza visible del CSJ es Ian Duncan Smith, un católico convencido y antiguo líder conservador. Su idea básica es que el permisivismo de los laboristas, unido a una política fiscal que privilegia la inestabilidad familiar, ha potenciado ciertos problemas sociales como el fracaso escolar, la dependencia de los subsidios o la adicción al alcohol y a las drogas.

Para Duncan y los suyos, la regeneración de la sociedad británica pasa por promover el matrimonio y la estabilidad familiar. Desde luego, los conservadores no andan muy descaminados a la vista de las alarmantes tasas de divorcio, el descenso de la nupcialidad y la aceptación creciente de la cohabitación en Gran Bretaña.

El que los conservadores hayan tomado la bandera de la defensa de la familia no responde solo a motivos ideológicos. Hasta la fecha, el CSJ ha elaborado tres informes (2006, 2007 y 2009) que muestran la correlación existente entre la inestabilidad familiar y los problemas sociales (ver Aceprensa, 23-07-2009).

¿Por qué “compasivo”?

Si el CSJ ha dado a Cameron un buen arsenal de datos y argumentos para promover los valores familiares sin complejos, ResPublica le ha proporcionado las herramientas necesarias para “humanizar” el neoliberalismo de Thatcher con medidas sociales centradas en los más desfavorecidos.

El fundador de ResPublica, Phillip Blond, es un pensador político que lleva tiempo abogando por un “conservadurismo social”; lo denomina Red Torysm, si bien el nombre surgió hace varios años. Nacido en el ambiente obrero de los arrabales de Liverpool, Blond estudió filosofía y ciencias políticas en la Universidad de Hull y también teología en Cambridge.

Algunos han considerado a Blond como el filósofo de cabecera de David Cameron. Pero todavía es pronto para saberlo. A fecha de hoy, el líder conservador se ha limitado a apadrinar el lanzamiento de ResPublica.

Con la expresión “centro compasivo”, el astuto Cameron trata de sacudirse la visión del thatcherismo que ha pasado al imaginario colectivo. Frente a los excesos del capitalismo neoliberal, él abogaría por un modelo de economía de mercado que premia a los buenos (la clase trabajadora) y castiga a los malos (los especuladores).

Todavía no está claro que el “centro compasivo” de Cameron sea lo mismo que el Red Torysm. Pero, de momento, coinciden en algunos objetivos básicos: distanciarse de la política económica de Thatcher, defender los valores familiares y combatir el individualismo extremo.

“El Red Torysm es un conservadurismo que cree en la familia y en las relaciones humanas, que tiene una visión social y que produce una economía transformadora que mejora el bienestar de la mitad inferior de la sociedad”, explica Blond a Emili J. Blasco en una entrevista para ABC (15-02-2010).

Renovar el debate público

A diferencia de Cameron, Blond no tiene sobre sus espaldas el peso de unas elecciones generales. Esto le ha permitido pararse a pensar sobre los grandes problemas económicos, políticos y sociales que atraviesa hoy el Reino Unido.

Según el Manifiesto ResPublica, este think tank aspira a cambiar los términos del debate público. El diagnóstico inicial es rotundo: “Gran Bretaña atraviesa un momento de crisis económica, fractura social y fragmentación cultural. Nuestra economía está tocada. Y hemos perdido el sentido de responsabilidad social y un propósito moral compartido”.

La crisis que dibuja Blond tiene tres vertientes, que indican tres buenas intenciones que han descarrilado.

“En nombre de la libertad de mercado, hemos producido el auge de los monopolios que sofocan la competencia y concentran la riqueza y las oportunidades en unas elites impenetrables”.

“En nombre del Estado asistencial, el paternalismo estatal ha hecho saltar por los aires las aspiraciones personales y ha perpetuado el inmovilismo social, haciendo que millones de británicos desistan de alcanzar la independencia social y económica”.

“En nombre de la diversidad democrática, se ha perdido un propósito moral compartido dando lugar a una pluralidad de conflictos civiles que han perjudicado a la nación, han impedido las integración social y erosionado la identidad colectiva”.

Tras el diagnóstico, el Manifiesto propone una terapia. La idea de reconstruir la sociedad británica ha de apoyarse en dos principios básicos: recuperar la noción de bien común –que es algo más que el mero interés general de los burócratas– y fortalecer el asociacionismo cívico.

“En una sociedad civilizada, el mercado y el Estado no deberían ser vistos como la meta última o la mejor expresión de la humanidad. En realidad, son los medios para alcanzar nuestro objetivo; no son un fin en sí. Ese objetivo común lo decidirán los ciudadanos asociados, mediante la práctica y el discernimiento del bien común”.

Entre las medidas propuestas para cambiar la naturaleza anárquica del mercado y lograr el reparto de riqueza, Blond destaca tres: ayuda a la vivienda, ayuda al hijo y establecer más pronto un fondo de pensiones para que la gente empiece a ahorrar.

Y para transformar el asistencialismo estatista, Blond propone poner el Estado al servicio de la sociedad. Frente al sistema de provisión directa de servicios, cree necesario dotar de mayores poderes a las comunidades locales para que sean éstas las que identifiquen las necesidades reales de los ciudadanos.

martes, noviembre 17, 2009

Chile no es competencia en el gas

2009-11-17 09:00:02
Las autoridades energéticas bolivianas no creen que Chile sea un competidor serio en el mercado de gas de Argentina y, en ese marco, esperan elevar los volúmenes de gas que actualmente se envían a la nación vecina. Chile estrenará a principios de 2010, en Mejillones, la segunda planta de regasificación con la capacidad de recibir Gas Natural Licuado (GNL), provisto por otras naciones productoras del mundo y en ese marco se abrió la posibilidad de que Argentina adquiera ese energético.“La posibilidad de que Chile le entregue (gas a la Argentina) de ninguna manera será una competencia con un gasoducto”, afirmó el ministro de Hidrocarburos, Óscar Coca.Explicó que Argentina consume unos 40 millones de metros cúbicos por día y que el interés de Bolivia es incrementar esta provisión en función de una adenda que podría suscribirse esta semana en Sucre, durante la visita de la mandataria del vecino país, Cristina Fernández de Kirchner.Coca admitió el domingo que es imposible enviar gas a Argentina por encima de los 7 millones de metros cúbicos día, aunque podría duplicar la exportación el 2010.Explicó que no se pueden aumentar porque una parte del ducto en el lado argentino atraviesa una zona urbana y según la norma “por razones de seguridad pide que no se incremente la presión”, dijo